Pese al ritmo de exámenes y trabajos, tenía especial interés por comentar Plan oculto, film que recientemente recuperó en horario de máxima audiencia nuestra querida a la par que odiada La Uno (sí, ahora las siglas TVE son prehistóricas). El film se estrenó en abril de 2006, coincidiendo con la llegada a las salas de, por ejemplo, Volver. No puedo esconder que la película me aburrió soberanamente y no me sedujo, aunque la crítica siempre ha opinado lo contrario. El tiempo es caprichoso y ahora, revisada la cinta, Plan oculto aparece como uno de los thrillers más ínteresantes de los últimos años, una combinación estimulante de cine comercial y comprometido, palomitas y crítica, ritmo y seriedad. Pese a todo, Plan oculto tiene defectos que ya detecté en su día y que ahora vuelven con más fuerza. Claroscuros perfectos para construir una breve (por obligación) reseña.
Plan oculto empieza áspero y directo: las presentaciones, reducidas a un estupendo monólogo del no menos estupendo Clive Owen, dan paso al secuestro (por decirlo de alguna manera) de un banco y, con esta escusa narrativa, seguir las convenciones de un género repetido hasta la saciedad. Plan oculto, por fortuna, evita ser una fotocopia más: incluye un humor negro que funciona, una colección de secundarios en estado de gracia, un malo imprevisible y un bueno no idealizado, algo socarrón y oscuro. La acción desaparece y Plan oculto, en su faceta más europea, deviene un film de personajes y diálogos, una trama que acaba siendo la tapadera de otro relato de mayor calado: el egoísmo y la riqueza de un banquero sin escrúpulos, pieza clave en el genocidio nazi y, por lo tanto, detestable. Los personajes, ambiguos, no divinizados, efectivos, aparecen ante nosotros a modo de piezas de ajedrez: hay peones (Jodie Foster, vieja reina del thriller yanki) y hay dos reyes (Owen-Washington, aunque el ladrón atesore al final mayor moralidad que el policía de turno). Washington se limita a orquestar las mismas muecas de siempre y el espectador siempre anela más acción (sobre el personaje de Washington, debe detectarse una pequeña pero poderosa radiografía de la estupidez norteamericana, una sociedad que se cree la mejor y que luego, como ocurre en el film, no sabe dónde está ni qué lengua se habla en Albania). Plan oculto es una obra diferente, aunque no perfecta. Su condición especial justifica el post y el tiempo invertido.
3 comentarios:
Recuerdo que la ví en su día, compa Xavier, y me pareció una peli que, sin ser de gran calidad, sí que resultaba sorprendente en muchos detalles. Supongo que tendría que revisarla para poder pulir esas apreciaciones.
Un abrazo y buena semana.
Yo creo que este es el tipo de película que gana con un segundo visionado. Respecto a la historia en sí... a mi me gustó y me sorprendió, agradablemente, al ver como comenzaba siendo una historia de atracadores, para devenir en algo más.
Saludos.
Supongo que ya podemos mandarte las notas para el CINERANKING:
Sin nombre(Ganadora de mejor director y fotografia en Sudance):6
Coraline:4
Monstruos vs Aliens:3
Duplicity:2
The unborn:1
Angeles y demonios:1
Otra pelicula de huevos:1
Benjamín Martínez
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