Nunca he entendido el fenómeno Crepúsculo. Estamos ante el primer fenómeno parido y desarrollado vía Internet, Facebook y plataformas eclécticas, todo bajo la euforia de adolescentes con tendencia a los amores fáciles. Afortunadamente, Pedro Vallín, en su escrito para La Vanguardia del jueves 19, nos desvela los puntos que han convertido este crepúsculo marchito en un asunto de estado. Paralelamente a las palabras del sabio cronista, no hay duda que Crepúsculo es una de las franquicias más rentables de la historia: actores desconocidos (y malos) y efectos especiales sin demasiada enjundia. Si detectaron que la chica estaba más blanca que el mismísimo vampiro puber o que las escenas de vuelo al estilo Tigre y dragón estaban mal rodadas, entenderán perfectamente que Crepúsculo es un churro, un insulto, un artefacto miope, una colección de despropósitos, una oda a la castidad y una apropiación de la estética vampira, todo en pos de un amor idealizado, frío, banal. Vallín destaca lo peculiar del romance: es un amor necrófilo, el de quien ama más la ausencia que la presencia, quien prefiere el regodeo del rechazo que la celebración de la correspondencia. La love story de Crepúsculo bebe de lo emo y lo bizantino: es una historia peculiar, aunque con unos ingredientes harto conocidos. En una sociedad donde se aplaude lo voluptuoso (y musculoso) de ciertos cuerpos, la flacucha figura del señor Pattinson recuerda al poeta con taras emocionales, al bohemio complejo, a un Becker desubicado; su morbo nace del misterio, la austeridad y la elegancia de una cara felina y un torso infantil. Y Bella, nombre irónico, sigue el esquema de la chica mona pero no mucho, guapa pero no despampanante. Un elogio, en definitiva, a lo mórbido, lo muerto, lo pálido, lo inconsumable. Lo normal mezclado con lo imposible.
El club de fans de Crepúsculo no conoce límites. Para el asombro de muchos, la fiebre negra y roja se ha extendido a todo tipo de públicos. Amas de casa, jóvenes independizadas y gran parte del público gay han aplaudido la historia, ya sea vía libro o celuloide. Lo crepuscular ya forma parte de nuestro día a día: en cualquier parte a cualquier hora, las manos invisibles de los seres que en su día creara Stephanie Meyer extienden sus garras y matan la magia del buen cine. Trazar la imagen del seguidor prototipo es todo un reto. Según Vallín, los crepusculófilos prefieren los libros a las películas, algunas camuflan las tapas de las novelas en el transporte público para que no las tachen de infantiles; no les gusta Pattinson en particular, pero sí el amor idealizado, un tipo romántico, un héroe atormentado, solitario y profundamente fiel a sus convicciones. El amor idealizado, el flechazo utópico y la castidad anacrónica ya aparecían en los cantares de gesta del medievo, pero ahora lo vampiro, potenciado con Van Helsing y mejorado con True Blood y Déjame entrar, se ha consolidado como moda fuerte y agobiante. Fábrica de suspiros y sonrojos. Y como contrapunto, Luna nueva se inicia en la naturaleza licántropa, potencia lo salvaje y lo contrasta con la marmórea silueta de su protagonista. El dúo se amplía a triángulo y amar a Edward o a Jacob, como ocurre con Jack y Sawyer en la serie Perdidos (salvando, obviamente, las distancias), es cosa prioritaria. Carne de salvapantallas y chats a tutiplén. Todo un circo a partir de la mitología.
Analizar los entresijos de estos colmillos sin afilar implica conocer las opiniones de la gente de calle, no cinéfilos o especialistas. Este tipo de amor no se encuentra de verdad, por eso leemos esos libros, comenta una seguidora en el artículo de Vallín. Además, es la típica historia que nos gustaría que sucediera. Tienes 29 años y ya te has llevado algunos desengaños, así que piensas que te apetecería encontrar algo tan perfecto. Hollywood reivindica su condición de fábrica de sueños: si Crepúsculo narra la (ir)realidad que queremos (y que nunca tendremos), el cine en mayúsculas se niega a convertirse en el opio del pueblo, a ser un mero reclamo para empapelar libretas, carpetas y estuches rosa. Todo un dato para una década que, a nivel cinematográfico, se ha caracterizado por desmontar la típica historia de amor. Las comedias de ahora narran penas amorosas, la penitencia que paga el protagonista por haberse creído las canciones pop y las comedietas románticas. Pero hay mucha mentira en estos mundos de falsa irreverencia: Juno, por ejemplo, era ingeniosa, pero también una película conservadora que se posicionaba en contra del aborto. Ello nos lleva a considerar Crepúsculo como un producto honesto que no ofrece más que lo que propone. He aquí el por qué de tanto alboroto.
Hastiados, hartos de tanto cóctel de sangre, quienes nos resistimos a cruzar la línia del mal gusto seguimos recordando los defectos de la saga. El problema viene de lejos porque los libros de Meyer empalagan, saturan y presumen con descaro de faltas sintácticas y formas al estilo Corín Tellado. La noria seguirá girando con más partes, más reediciones en dvd y nuevos trucos y trueques. Abróchense los cinturones: tras tanta teoría, seguimos sin entender nada de nada. No se asusten: los raros son la mayoría.
10 comentarios:
El éxito Crepúsculo lo comparo con el éxito Cris Morena de aquí de Argentina, una productora que actualmente saca al aire una barrabasada llamada "Casi Ángeles" con viajes en el tiempo al mejor estilo Lost, falsos tonos de crítica social, y con el peor guión que existe en esta vida. ¿Por qué tiene tanto éxito?, lo de siempre: toca todas las cosas que tienen que ver con las fantasías adolescentes (chicos lindos y valientes, situaciones riesgosas, música, etc).
Creo que el film es una verdadera basofia de lo mal hecho que está pero como historia en sí podría haber sido un verdadero boom en otras manos directrices.
Yo después de leer lo de la chica que mintió a la policía sobre un hombre que le mordió en el cuello, creo que este fenómeno fan se sale de madre, afición sí, fanatismo no.
Pues me ha ecantado el comnentario critico. Genial y muy acertado. Eso si, no he visto ni una de las dos pelis hasta ahora. Supongo que el fenomeno es un poco harrypotteresco, tu me entiendes.
Un comentario excelente Xavi...sin duda lo ke atrae de la película es la idealización del mundo, algo imposible, ideal, cuanto más realista sea una historia más se aleja del público en general, y del adolescente en particular, esa es la cuestión, quremos obviar la realidad y nos fijamos en fantasías. He akí otro de las cuestiones del fracaso del cine español y la victoria del americano...por esa misma razón...Ni he leído los libros, ni he vsto luna nueva, solo crepúsculo y me parece una mala película...lo unico bueno es el sonido...los actores intragables..en fin..excelente reseña..saludos
Un comentario excelente Xavi...sin duda lo ke atrae de la película es la idealización del mundo, algo imposible, ideal, cuanto más realista sea una historia más se aleja del público en general, y del adolescente en particular, esa es la cuestión, quremos obviar la realidad y nos fijamos en fantasías. He akí otro de las cuestiones del fracaso del cine español y la victoria del americano...por esa misma razón...Ni he leído los libros, ni he vsto luna nueva, solo crepúsculo y me parece una mala película...lo unico bueno es el sonido...los actores intragables..en fin..excelente reseña..saludos
Crepusculo, Harry Potter... todos persiguen una temática (entre comillas) parecida. Al igual que algunas de las peliculas de HP son buenas, sobretodo la de Cuarón, podrían hacer lo mismo con las de crepúsculo. Hacer buenas peliculas con ritmo, bien construidas y con buenos putos efectos especiales, no los echos con el Maker, por Dios!
Aunque son muchos los que critican a los actores, creo q tanto Pattison como Stewart son prometedores actores, no hay mas que ver su filmografia, estas películas son la unica excepcion con el conjunto d las q ya han filmado.
Saludos y excelente analisis Xavi.
"Los raros son mayoria" xD
te escribo para que me apuntes al cineranking próximo, jejeje, si es que se puede, jajaja!! ;)
y ya me iré enterando sobre la marcha, jajajaja.
perdón por el offtopic.
Saludos!!
Estoy mas en la linea de Sean, no me interesa tanto el Qué sino el Cómo, que en este caso es bastante flojo.
Solo una enmienda a tu sesuda evaluación social: No ha gustado a los gays. Han ido a verla, se han puesto las botas con los chavales pero no les ha gustado. Por eso son gays, no mujeres. (con mis respetos para ellos/ellas y en base a tu generalización)
Lo que me parece más sorprendente no es este tipo de películas, en el fondo cuestan cuatro duros y llenan bastante la sala, lo que me sorprende es lo de los libros, que parece que rellenan el hueco que en los adolescentes masculinos tiene el "street fighter" o a lo que sea que jueguen ahora.
has leido los libros???, guau que aguante, yo la rechazo definitivamente, varias veces mi hermana me insiste en que la veamos pero es que ni los actores me hacen gracia, no entiendo por qué tanto alboroto
Pues anda que no te has tomado trabajo.
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