LAS REGLAS DEL JUEGO (THE RULES OF ATTRACTION), de Roger Avary
Largometraje nº 47. Cinoscar Summer Festival 2014: Sección fuera de concurso
Elección de Paula Morales
EE. UU., 2002. Dirección: Roger Avary Guion: Roger Avary, a partir de la novela de Bret Easton Ellis Duración: 105 min. Género: Tragicomedia Fotografía: Robert Brinkman Música: Tom Hadju y VV. AA. Reparto: James Van Der Beek, Ian Somerhalder, Jessica Biel, Kip Pardue, Thomas Ian Nicholson, Shannyn Sossamon, Faye Dunaway, Kate Bosworth.
¿De qué va?: Distintos personajes se dan cita en una facultad de arte. Las fiestas, las resacas, el sexo y el consumo de distintas drogas son el pan de cada día de Sean, un narcotraficante atractivo; Víctor, un 'porreta' que vuelve a Nueva Inglaterra tras una travesía de desenfreno por Europa; Paul, un homosexual con grandes provisiones de marihuana en su habitación; Lauren, una chica que pierde su virginidad en circunstancias bastante escabrosas; y Lara, que al contrario de Lauren disfruta y alardea de su ropa cara y actitud promiscua.
Reseña Xavier: Roger Avary escribió junto a Quentin Tarantino el oscarizado guion de Pulp Fiction, y en los primeros minutos de Las reglas del juego, dirigida por Avary, se cita a Tarantino como uno de los referentes éticos y estéticos de la 'generación perdida' que retrata la película: jóvenes narcisistas, con nula capacidad de empatía, con escaso sentido crítico, frívolos hasta decir basta y únicamente empeñados en vivir bajo los efectos de cuantas sustancias estén a su alcance. Las reglas del juego es un documento revelador, pero también muy pasado de rosca: es lícito preguntarse dónde están los límites entre la realidad y la caricatura, hasta qué punto los seres que discurren por los pasillos y los fiestorros del film son humanos de carne y hueso o personajes ficticios sin alma ni credibilidad. El exceso es precisamente una de las señas de identidad de la película: en este sentido, a la propuesta de Avary, aunque a ratos resulta desagradable y deslenguada sin más, no se le puede negar cierta coherencia interna, ya que filma el desenfreno de sus personajes apelando a recursos visuales igual de alucinados y alucinantes (las escenas que rebobinan acciones pasadas sirven para potenciar la sensación de vacío y sinsentido general, la pantalla partida dota de dinamismo a las historias cruzadas, el montaje hipervitaminado y la excelente selección musical ayudan a zambullirse en el mundo que transitan los protagonistas, etc.). Con todo, tal vez lo incoherente de la propuesta descansa en su mirada: ¿la película expone hechos sin más... o quiere premiar o sancionar a los personajes? Ante la imposible reconversión que muestra el final de la película, ¿qué soluciones se plantean? Si el citado Tarantino es un tótem cultural para gente tan deleznable, ¿hasta qué punto Tarantino y el propio Avary admiten ser parte o se distancian de la 'sociedad basura' que parecen acoger a su alrededor? Una película, en definitiva, poderosa y polémica, pero a la postre ligeramente descompensada, claramente contradictoria: sus exageraciones forman parte de su singularidad, y a la vez su principal escollo a la hora de definir un mensaje más nítido y unos personajes más perfilados e interesantes. Puede que a título personal no sea un retrato generacional demasiado certero, ni tan siquiera una de las parodias más notables de los nuevos 'pijos universitarios', pero sí se trata de una de las propuestas más originales de los últimos años. Al fin y al cabo, la película funciona como una calada de porro: o coloca hasta abrazar el nirvana, o te lleva directamente a las puertas del vómito.
Reseña Mayra: Las reglas del juego es una película de historias cruzadas donde los protagonistas son jóvenes universitarios viviendo de manera frívola y desenfrenada, que además dependen de drogas, alcohol y sexo como un aliciente vital. Un film que aúna diferentes personajes, cada cual con su propia historia (algo planas y de poco interés), pero todas con el mismo estilo de vida de fanfarroneo y descaro. A pesar de contar con una trama poco interesante, el visionado de esta cinta resulta pasable debido al montaje de la misma que se presenta algo original, envolviendo el contenido de manera atrayente y acompañándolo con una banda sonora acorde (aunque se debe admitir que a ratos en ciertas escenas aceleradas también se vuelve algo engorrosa). El problema que le encuentro a Las reglas del juego es que me resulta excesiva en todo momento y tan superficial como sus personajes. Una cinta que según el sugestivo gusto del espectador puede funcionar tal y como los ‘alicientes vitales’ de los personajes en cuestión: placentera o desagradable, pero siempre con un efecto poco duradero.
Palmarés: Premio principal de los Golden Trailer Award, que valoran los mejores tráilers cinematográficos de cada temporada.
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