martes, 19 de marzo de 2013

CORTOMETRAJES: CURFEW (HORA LÍMITE), de Shawn Christensen

CORTOMETRAJES 03: CURFEW (HORA LÍMITE), de Shawn Christensen (EE. UU., 2012)
Palmarés: Oscar al mejor cortometraje del 2012. Premio al mejor cortometraje en los Festivales de Cleveland, Estocolmo, Granada y Nashville. Premio del jurado del Festival de Woodstock. Premio del público en los Festivales de Bruselas, Toulouse y Clermont-Ferrand. Triple reconocimiento en el 24fps International Short Film Festival: mejor cortometraje, premio del público y galardón al mejor actor.
Comentario: Curfew es un ejemplo de que las historias más notables son aquellas que están dotadas de alma. Con poquísimos elementos, con unos personajes que no conocemos pero que en pocos minutos se hacen querer, con una historia extraña a la par que reconocible, Curfew es un relato de corto formato pero de largo recorrido. Imposible no volver a ella, acordarse de alguna escena días después de su visionado o interrogarse cómo empezó el conflicto y en qué punto quedará el mismo tras el The End marcado por el director. Porque logra algo muy difícil: no solo cuenta con la atención del espectador sino con su empatía. La historia nos gusta, pero ante todo nos importa. Roba el corazón sin trucos bajos en apenas un cuarto de hora. Curfew nos acerca el devenir de Richie, un drogodependiente egoísta decidido a cortarse las venas. Pero el destino es irónico y una parte de su pasado en forma de una sobrina sabelotodo cambiarán el naufragio por un nuevo comienzo. Christensen, notable tanto en sus tareas de director como de actor, saca oro y candor de unos escenarios y unos prototipos a priori nada amables. Tiene toques de Sofia Coppola y del Vincent Gallo de Buffalo '66 por su nocturnidad, su aliento mágico, su obsesión por la figura del fracasado, su descripción de una generación desencantada, su aspereza exterior y su belleza interior. Hay que seguir la pista de Shawn Christensen: puede brindarnos muchísimas alegrías en breve.


Para buscadores de historias terapéuticas.
Lo mejor: La química de sus actores.
Lo peor: Cierta tendencia a la carambola narrativa (final incluido).

Nota: 7'5

1 comentario:

Daniel Bermeo dijo...

Quiero verlo. La niña protagonista es de origen ecuatoriano, mucho bombo y platillo hubo por acá con el Oscar que ganó el film así que quiero visionarlo.

Abrazo!