miércoles, 14 de diciembre de 2011

A puñetazos con la vida: Crítica de WARRIOR

Si revisamos el cine de los últimos años no encontraremos ninguna película de boxeo. Obviamente la temática deportiva suele aparecer como contexto de la historia o explicación de los personajes, pero en ningún caso estamos ante verdaderas filmaciones de combates cuerpo a cuerpo. The Boxer era un thriller político, Huracan Carter una trama carcelaria, Cinderella Man un relato de la crisis económica del 29, The Fighter se imponía como retrato familiar antes que como espectáculo pugilístico, y nada que decir sobre el magno melodrama de superación y resistencia que es Million Dollar Baby. Pero señores: nada que se asemeje a la lucha carnívora de los contrincantes subidos al cuadrilátero. Warrior se desmarca de todos estos títulos y ofrece durante su última hora una fiesta de testosterona, guantazos y bloqueos. Nos lleva hasta la lona del ring, sentimos el sudor que recorre los músculos magullados de los luchadores, incluso palpamos la tensión de los vestuarios, las ganas por llegar hasta el combate final y vencer en el último round. Warrior reproduce la parafernalia que rodea un torneo de boxeo, y lo hace llevando la cámara a escasos milímetros de los protagonistas, con una banda sonora potente y unas interpretaciones tan trabajadas como los cuerpos de los actores. No tiene miedo a acabar siendo un blockbuster masculino y facilón, aunque en parte lo sea: como los espectadores viendo una lucha tras otra, me imagino la sala de proyección llena de hombres gritando y palomitas por el suelo. Warrior ofrece lo que promete, realmente hubiera podido aspirar a muchos más... ¿y qué?: tras años de sequía, Warrior funciona como un Big Mac de gusto industrial pero muy nutritivo. Nada que objetar.


Y se preguntarán: ¿qué sucede en la primera hora? Pues muchos de los elementos ya vistos en las películas citadas. Aunque el guión se encarga de desvelar sus cartas poco a poco, de forma que nunca intuímos la relación de los dos protagonistas hasta bastante tarde (ya la descubrirán por ustedes mismos). El eje vertebrador es el personaje de Nick Nolte, que logra su mejor interpretación en mucho tiempo y que debería seguir peleando, pero esta vez en la terna del Oscar al mejor intérprete secundario del año. Warrior es una americanada monumental a la que se le pueden reprochar muchas cosas, incluso ciertas inverosimilitudes (¿un profesor de física reconvertido en luchador de wrestler?). La gracia está en entender que Warrior allana el terreno durante su primera mitad para que aflore el drama en la superficie, y alardea de medios y potencia visual en su segundo tramo, de forma que el espectador salga de la sala totalmente saciado y contento. Gavin O' Connor suma con este su segundo film deportivo tras El milagro, olvidada historia en torno a un equipo de hockey sobre hielo. En ambos casos estamos ante películas manidas, grandilocuentes, con frases efectistas y un claro sentido de la justicia que premia a los personajes en la foto finish de su esfuerzo físico y acto heroico. Ninguna de las dos pasará a la historia, y por reflejar dos deportes típicamente yankis tendrán difícil su consolidación entre nosotros. Pero que nadie le reste méritos a Warrior: juega limpio, pega de frente y sacude allá donde cierto cine academicista no se atreve a llegar, o sea, al espectáculo de técnica impecable y genial aportación actoral que no reniega de la épica de la victoria, del impossible is nothing o del happy ending.


Nota: 8

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2 comentarios:

BeaClane dijo...

Soy gran seguidora de los deportes de contacto, hace más de seis años que sigo muy de cerca el mundo del Wrestling y este último me he empezado a interesar por las MMA (Artes Marciales Mixtas), más concretamente en UFC. Esta película es de obligado visionado en mi lista, hoy mismo me haré con ella y podré disfrutar de todo lo que comentas, me alegra saber que no es sólo músculo, que las interpretaciones están trabajados y el guión no está vacío. Parece ser que al fin estamos ante una buena película de lucha profesional.

Genial la crítica, te llevas un SÍ en FilmAffinity ;). ¡Un abrazo!

Dialoguista dijo...

Me fascinó!!! Me alegra que también la hayas disfrutado. Tendrá sus fallos, pero que películaaa!!! :D