San Sebastián se convertirá un año más en la capital del cine con la celebración de la edición número 62 de su Zinemaldia. 8 días para ver películas, fotografiar a estrellas del celuloide y, con un poco de suerte, disfrutar de la ciudad de Donosti, así como de sus restaurantes y puestos de tapas. San Sebastián, año tras año, se reivindica como el gran bastión de la temporada festivalera española, y de su programación dependerá en gran medida la oferta que tendremos en los cines durante los próximos meses. Denzel Washington, Premio Donostia, abrirá el certamen con The Equalizer (El protector), cinta de acción que inaugurará la semana de cine a primera hora de la mañana del viernes 19. La clausura del sábado 27 correrá a cargo de otro nombre con solera: Benicio del Toro, segundo homenajeado y protagonista de Escobar: Paradise Lost, película que cerrará la sección Perlas. Y entre los dos eventos discurrirán un sinfín de títulos, autores, invitados y carreras por no perderse ninguna película de la programación. Desde Cinoscar & Rarities intentaremos resumir todo ello en 3 posts especiales que nos ayudarán a contextualizar y a calentar motores de cara a la cita donostiarra. Empezamos nuestro análisis repasando el cine español presente en el festival.
1. CINE ESPAÑOL
El anuncio de los films españoles a competición en Donosti siempre tiene lugar en un acto especial que se celebra cada verano en la sede madrileña de la Academia de cine. El dato pone de relieve la vinculación que mantiene nuestra industria con el certamen vasco: no es casualidad que las recientes ganadoras del Goya (Pa negre, No habrá paz para los malvados, Blancanieves, Vivir es fácil con los ojos cerrados) hayan sido títulos premiados y proyectados en San Sebastián. El festival corresponde una vez más a la fidelidad del cine español programando títulos de distinta tipología en todas las secciones, pero al mismo tiempo pone de manifiesto la incapacidad de nuestro cine, bien por limitaciones internas o por mero inmobilismo, para acceder a escaparates internacionales (Berlín, Cannes y Venecia). San Sebastián ni puede ni debe analizar esta cuestión, pero su programación se resiente de ello, o cuanto menos queda condicionada por este hecho.
Los ejemplos son numerosos, pero citaremos únicamente dos. Lasa y Zabala, nueva mirada a la sombra de ETA, y Murieron por encima de sus posibilidades, sátira sobre la crisis económica dirigida por Isaki Lacuesta, concurren inexplicablemente fuera de concurso, una estrategia extraña teniendo en cuenta que Lacuesta ganó la Concha de oro por un film (Los pasos dobles) que perfectamente hubiese podido programarse en una sección de menor peso. Por su parte, Icíar Bollaín presentará en tres sesiones especiales el documental En tierra extraña, un retrato de distintas personas que han tenido que emigrar fuera de España para encontrar trabajo en tiempos de crisis: de nuevo, un proyecto y una cineasta lo suficientemente interesantes como para figurar en apartados más prioritarios del festival. Todas ellas cuestiones debidas no tanto a una mala organización del equipo del festival como a la necesidad de dar espacio a muchos nombres con sello español. La duda es si todos ellos encontrarán su público y su parcela mediática en San Sebastián. Eso, más la sensación de que el resto de citas otoñales (Valladolid, Segovia y Sevilla principalmente) no tendrán muchas novedades locales para programar en sus parrillas.
Murieron por encima de sus posibilidades, de Isaki Lacuesta. Sección oficial fuera de concurso. |
La sección oficial se afianza como trampolín comercial de nuestras películas más ambiciosas. La isla mínima, apeada inesperadamente de la carrera por el Óscar, será la primera en pasar la criba de la prensa, aunque ya ha recibido un apoyo mayoritario en algunos de sus pases previos: del ruido que genere en el festival dependerá en gran parte su éxito en salas, ya que la película llega a los cines el viernes 26. Autómata, ciencia ficción dirigida por Gabe Ibáñez y protagonizada por Antonio Banderas, tendrá su estreno mundial en San Sebastián, y posteriormente aterrizará en Sitges y en Estados Unidos: será sin lugar a dudas uno de los títulos estrella de la selección, aunque a priori esté muy lejos de las coordenadas del palmarés. Por el contrario, Magical Girl de Carlos Vermut promete ser la sorpresa del año y, por qué no, convertirse en el toque excéntrico del cuadro de ganadores: aunque muchos ya la vieron en su première en Madrid, estamos seguros que todos sus pases completarán aforo y llenarán los corrillos festivaleros.
La presencia de Loreak (Flores) en la sección oficial será la punta de un iceberg imparable: el auge de las nuevas voces del cine vasco. En los 90, autores vascos como Bajo Ulloa y Uribe ganaron la Concha de oro, pero por primera vez el cine vasco reivindica tanto su espacio dentro del cine español como su lengua a la hora de contar sus historias. El nuevo trabajo de Jon Garaño y Jose Mari Goneaga tras 80 egunean puede marcar la consagración de un modelo de cine que ya triunfó en Donosti con Pa negre y Elisa K en el que fue, recordemos, el gran año del cine catalán. Porque el cine vasco tiene muchísima vida más allá de las bromas de Ocho apellidos vascos: Negociador de Borja Cobeaga en Zabaltegui, la ya citada Lasa y Zabala, Abriendo Puertas en Zinemira y otros nombres marcarán el que puede ser el gran año del cine vasco.
Finalmente, en la sección Made in Spain se dará cobertura a los títulos más interesantes del último cine español. La selección se nutre del 'último underground español', una etiqueta que estuvo presente en la sección oficial del año pasado con La herida y Caníbal, y cuya tendencia seguirá este 2014 Magical Girl. Quienes se perdieron los films locales más interesantes en su paso en salas o los cronistas extranjeros que quieran tomar la temperatura de nuestro cine tendrán en Donosti un muestrario inmejorable de ese cine fragmentado por la crisis, aunque a su vez arriesgado y necesario. La convivencia en este apartado del pelotazo Ocho apellidos vascos o la popular Carmina y amén con títulos de culto como Stella cadente o 10.000 Km., sin olvidar el único film español presente en Cannes (Hermosa juventud) o los documentales más importantes de la temporada, algunos venidos del D'A barcelonés (Sobre la marxa, Ciutat morta), es una prueba de la heterogeneidad de nuestro cine y de la necesidad de reinvindicar títulos que en su momento tuvieron una exhibición más que limitada pese a su prestigio crítico.
Un cine español, en resumen, que desplegará todo su arsenal en un festival que se ha convertido en su principal aliado de cara a su visibilización. Con suerte, muchos espectadores podrán encontrar esa joya perdida de nuestro cine. Mientras, en los pasillos del Kursaal se cerrarán compras, ventas y nuevas perspectivas de futuro para el cine español. Incluso algunas Perlas como Still The Water (Lluís Miñarro) y Relatos Salvajes (El Deseo) sumarán a una inabarcable lista de producciones y coproducciones locales. Veremos si todo ello se traduce también en premios, incluso en una Concha de oro que se avecina muy disputada. En el segundo escrito especial del Festival de San Sebastián analizaremos todos los films de la sección oficial: ¡os esperamos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario