Silent Heart, de Bille August. Sección oficial a concurso. |
Donosti sigue recibiendo curiosos, estrellas y espectadores en sus distintas sesiones. Hoy sábado se han proyectado tres films a concurso, todos muy diferentes entre ellos a lo que estilos e historias se refiere. Una variedad que cuesta digerir, porque los pases de prensa se suceden a un ritmo vertiginoso. Nada mejor que ordenar las ideas: estas han sido nuestras impresiones de los films proyectados.
La mañana ha empezado con SILENT HEART (CORAZÓN EN SILENCIO), el regreso de Bille August, Óscar por Pelle el conquistador, el drama de factura nórdica que le hizo popular en sus inicios. Un film coral, con contados pero deliciosos momentos tragicómicos, que cuenta la historia de una familia que se reúne para despedirse de la madre, que sufre una enfermedad degenerativa. La clásica pugna y reconciliación entre padres, hermanas y nietos discurre de forma serena, y en sus últimos minutos la película pone sobre la mesa una cuestión tan interesante y complicada como el derecho de todo ser humano a elegir el momento de su muerte. No todo resulta creíble, pero sí reconocible. Un film de diálogos, de interiores y de confesiones. En lo personal, un film solvente pero no excelente. Para una compañera de sesión, una obra extraordinaria. Veremos qué opina el jurado: podríamos estar ante la concha de este año.
UNE NOUVELLE AMIE de François Ozon ha sido a título personal el film del día en Donosti. Ozon, muy divertido en sus intervenciones durante la rueda de prensa de la película, ha presentado un film arriesgado, que evita medianías y que como resultado sumará tantas adhesiones como odios. Poco se debe explicar de la cinta: vale la pena verla a ciegas, sin prejuicios ni información previa. Sí podemos decir que la operación de Ozon es arriesgada, por no decir suicida. El cineasta francés está acostumbrado a moverse en las fronteras de lo correcto y lo incorrecto, lo masculino y lo femenino, la inocencia de la amistad y la carnalidad del sexo, la realidad 'homo' y 'hetero'... UNE NOUVELLE AMIE toca y traspasa todas esas fronteras. Y varias veces. Y de la forma más surrealista y tragicómica posible. Lo ridículo, de nuevo, se aúna con lo grave. Ozon es un grande, pese a que el film ganaría enteros con menos vueltas de tuerca. Pero solo un artista de la lucidez, la transgresión y la genialidad de Ozon puede salir airoso de un cocktail tan explosivo. ¡Ah! Y prepárense para ver a Romain Duris vestido de femme fatale, cual chica Almodóvar en pie de guerra. Una película excesiva, pero repleta de genialidades.
Autómata, de Gabe Ibáñez. Sección oficial a concurso. |
AUTÓMATA, por desgracia, carece de la inventiva del director galo. La eterna pugna entre robots y humanos suma nuevo episodio, sin mucho que contar y con un universo, una narrativa y una apuesta visual que remite descaradamente al clásico Blade Runner. El film, un paso más de la ciencia ficción española con vistas a un mercado internacional, es irreprochable técnicamente, pero sigue demostrando una preocupante sequía de inventiva. A Autómata no le sobran gadgets: le falta guion. Eso a pesar de la esmerada odisea que emprende Antonio Banderas en el film. Será un éxito en salas, pero pasará bastante desapercibida en la competición donostiarra. Tan fugaz, tal vez, como la intervención de Melanie Griffith en el film, detalle que ha causado más de una risa en la sala.
Black Coal, Thin Ice, Oso de oro en Berlín que se exhibe en la sección Perlas. |
Y como la parrilla es tan variada, acabamos con una reivindicación: la sección Eastern Promises. Una colección excelente de títulos centroeuropeos. Hoy hemos.podido ver una joya: la rumana 12:08. Sátira y crítica, costumbrista y surrealista, muy entrañable y divertida. Título anterior al boom del cine rumano, por lo que su descubrimiento o revisionado es más que pertinente. Mañana, más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario