2046, de Peer Raben, Shigeru Umebayashi y VV. AA. (Wong Kar-Wai, Hong Kong, 2004)
Palmarés: Golden Horse Award y Hong Kong Film Award a la mejor banda sonora del 2004.
El compositor: Shigeru Umebayashi es uno de los músicos japoneses más respetados. Fiel a directores como Zhang Yimou y Wong Kar-Wai, ha trabajado en más de 40 banda sonoras para películas chinas, japonesas y norteamericanas. Su último trabajo es la música de A single man (2009). Aunque aparece acreditado como el principal autor de la música de 2046, la película contiene piezas y colaboraciones de otros compositores, autores y cantantes.
La reseña: 2046 es uno de los ejemplos más evidentes de que el cine es la conjunción de imagen y sonido, la fusión de unos fotogramas bellos con una buena música. Escuchar la banda sonora de 2046 supone volver a transitar los mundos oníricos del film, y al mismo tiempo recordar el film supone evocar gran parte de su soundtrack. 2046 es una película de culto y una rareza por muchos motivos: su rodaje se hizo de forma fragmentada por distintas imposiciones externas al proyecto, las malas lenguas dicen que Kar-Wai realizó infinidad de versiones en la sala de montaje, se estrenó a trompicones en el Festival de Cannes 2004 y su llegada a las salas españolas el otoño de ese año consiguió despertar una auténtica 'fiebre Kar-Wai'. El cine de Kar-Wai es sensorial y sinestésico: la banda sonora de In the Mood for Love ya era una pieza de gran belleza, el hit de los 60 que sonaba al final del romance 'tango' de Happy Together es difícil de olvidar y en Chungking Express, donde sonaba California Dreamin, ya fuimos testigos del amor que siente el hongkonés por la música en español. El Main Theme, luego utilizado en infinidad de spots, es una de las composiciones más redondas de los últimos años: en sus distintas versiones, oímos el paso del metafórico tren que lleva al protagonista a su habitación de hotel. La evocación del romance del viejo Hollywood brilla con Nat King Cole, Xavier Cugat, Connie Francis y Dean Martin y sus Sway, Perfidia, The Christmas Song y Siboney. Las piezas instrumentales van del viento a la cuerda, todas ellas músicas atmosféricas y delicadas, envolventes a la par que frágiles: los interludios repiten estructuras melódicas, reproduciendo desde la partitura los distintos estados de indecisión y enamoramiento del personaje. Y el romance llega a su máxima expresión con la ópera Casta Diva, uno de los mejores sonidos que salen del gramófono de Kar-Wai. Un conjunto perfecto que vendió un gran número de copias, algo poco habitual para una banda sonora de un film que nunca logró estar entre las propuestas más vistas de la cartelera. Una estupenda colección-fusión de jazz, bolero y música orquestral. El tiempo no pasa ni por el film ni por su música: es una de las grandes obras maestras 'latinoasiáticas' del cine.
Los mejores tracks: Imposible escoger.
Nota: 10
1 comentario:
Falto agregar un detalle no menor: buena parte de los tracks son músicas compuestas para películas anteriores de Truffaut y Fassbinder, entre otros. Es interesante entonces el metalenguaje que maneja WKW en sus obras también se aplica a las bandas sonoras de sus films.
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