martes, 9 de febrero de 2016

CRÍTICA | BROOKLYN, de John Crowley


El Nueva York irlandés
BROOKLYN, de John Crowley
6 nominaciones a los Bafta, 5 a los Critics Choice Awards y 3 a los Óscar
Irlanda, 2015. Dirección: John Crowley Guión: Nick Hornby, a partir de la novela de Colm Toibin Fotografía: Yves Bélanger Música: Michael Brook Reparto: Saoirse Ronan, Emory Cohen, Domhnall Gleeson, Julie Walters, Jim Broadbent, Michael Zegen, Mary O'Driscoll, Eileen O'Higgins, Emily Bett Rickards, Paulino Nunes, Eve Macklin, Maeve McGrath, Jenn Murray, Aine Ni Mhuiri, Nora-Jane Noone Género: Drama Duración: 110 min. Tráiler: Link Fecha de estreno: 26/02/2016
¿De qué va?: Años 50. Eilis Lacey deja su Irlanda natal y se traslada a Nueva York. La joven empieza a trabajar en unos grandes almacenes. Tiempo después, conoce a un chico italiano con la que hace planes de futuro. Al recibir malas noticias de su casa, Eilis decide regresar a Irlanda, aunque no sabe que ese viaje puede marcar para siempre su futuro.


En El sueño de Ellis, el director James Gray retrataba los bajos fondos del Nueva York de los años 20 a partir de la mirada de una inmigrante polaca. Dispuesta a modo de reverso romántico de esa película, Brooklyn, dirigida por uno de los artífices de la cuestionada segunda temporada de True Detective, cuenta la epopeya emocional de una joven irlandesa en la eterna ciudad de las oportunidades. Si Gray se fijaba en el duro contexto social de la historia, Crowley se sitúa en el terreno de la fábula amable. La protagonista de Brooklyn consigue hacer frente a las adversidades a la vez que atesora cierta inocencia, como si su recorrido fuera el de una heroína romántica cortada por los patrones más clásicos. Un punto de partida (y regreso) que sonaría a melodrama rosa si no fuera por la notable recreación de época y por la sutil interpretación de Saoirse Ronan, aunque su trabajo esté muy por debajo del aplomo que demanda el Óscar. Brooklyn, en definitiva, no cuenta nada nuevo, a duras penas dejará huella en la temporada de premios que nos ocupa, pero está tocada por un encanto 'vintage' bastante loable. Un cuento sin pretensiones ni altisonancias que ha gustado entre las filas de los académicos entrados en años. Nostalgia cinematográfica que se ve a gusto, aunque en el fondo no estemos demasiado lejos de una versión sofisticada de El diario de Noa y otras tontunas 'pseudorománticas'.


Para los que buscaban una película que guste igualmente a abuelas, madres e hijas.
Lo mejor: Julie Walters, a pesar de sus contadas escenas.
Lo peor: En su segundo tramo pierde fuelle.


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EL PODCAST DE CINOSCAR & RARITIES: ESPECIAL PREMIOS ÓSCAR 2016

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