miércoles, 1 de julio de 2015

CRÍTICA | DANZAD, DANZAD MALDITOS, de Sydney Pollack


DANZAD, DANZAD MALDITOS (THEY SHOOT HORSES, DON'T THEY?), de Sydney Pollack
Largometraje nº 19: Cinoscar Summer Festival 2015: Sección oficial a concurso
Elección de Diego Rojo
EE. UU., 1969. Dirección: Sydney Pollack Guión: James Poe y Robert E. Thompson, a partir de la novela de Horace McCoy Duración: 115 min. Género: Thriller dramático Tráiler: Link Reparto: Jane Fonda, Michael Sarrazin, Susannah York, Red Buttons, Gig Young, Michael Conrad, Bonnie Bedelia, Bruce Dern
¿De qué va?: En plena Depresión, distintas parejas se presentan a un extraño concurso de baile. Con el paso de los días, el desgaste físico hará mella en los concursantes, mientras que la competición gana en interés y espectadores. Sólo la pareja que logre aguantar en pie conseguirá una cuantiosa suma de dólares.
Palmarés: 9 candidaturas al Óscar: premio al mejor actor secundario.


RESEÑA MIGUEL: Danzad, danzad malditos es la mayor decepción que me he llevado en este festival. No es la peor, pero me da rabia lo poco que me ha gustado. Siempre le tuve muchas ganas; no sabría decir por qué, ya que ni siquiera conocía su trama; pero el hecho de que fuese dirigida por Pollack, protagonizada por Jane Fonda y con un título tan sugerente, eran emblema de calidad. Pero ni su visión del drama social de la época, ni su inventivo concurso llamaron mi atención. Todo me pareció impostado, muy teatral, con una falta de naturalidad preocupante. Sin contar que sus personajes eran del todo irritantes. Se salvan los actores, que se encuentran por encima de todo. 

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RESEÑA XAVIER: El año pasado tuvimos ocasión de acercarnos a la filmografía de Sidney Pollack con motivo de Los tres días del Cóndor. Ahora, Danzad, danzad, malditos nos permite volver a la obra de Pollack, en este caso, afortunadamente, con uno de los títulos más importantes de su carrera. El film, que mereció 9 candidaturas al Óscar, es una obra madura, de atmosfera turbia y un desenlace desolador. Pollack se avanza a la moda de concursos de talentos y reality shows en una película que toma para sí las falacias del show business, con punzante crítica social. Los personajes del film luchan en un maratón de baile, pero el tinglado, que dura semanas, acaba mostrando las bajezas de las Norteamérica posterior a la Gran Depresión: los concursantes se agarran a un clavo ardiendo a fin de ganar el premio final, el público descarga su frustración y adrenalina al ver el sufrimiento de los concurrentes, y la organización del evento manipula a unos y a otros con el objetivo de rentabilizar la jugada. No hace falta irse a variados ‘juegos del hambre’ o recrear un ambiente de ciencia ficción futurista: Danzad, danzad, malditos es una experiencia claustrofóbica, desasosegante y cargada de grandes y tristes verdades sobre la condición humana. Al final del metraje se llega exhausto, como sus míseros personajes. También con la sensación de que el film no ha perdido ni un ápice de actualidad. Nada que ver, en definitiva, con el thriller previsible y académico del año pasado. En lo personal, una de las revelaciones del festival. 

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RESEÑA ISIDRO: Me pongo Danzad, danzad, malditos algo desanimado pensando que veré una Grease sin 'summer lovings' ambientada en la Gran Depresión de los años 30 sobre una pareja de jóvenes bailarines que va de concurso en concurso (así de informado iba). Sentadas las bases de la película, en mi desánimo me da por pensar: “¿sabes quién podría hacer algo guapo con esto? Álex De la Iglesia, que basaría toda la película en la maratón y le saldría una gamberrada grotesca”. Pero cuando me di cuenta de que la película no era de bailarines profesionales, sino de gente desesperada económicamente que se apunta a un maratón de baile para conseguir un premio mínimo, y que toda la película se iba a desarrollar en la misma sala, oye, mandé a freír espárragos al tito Álex. Y es que esta Disparan a los caballos, ¿no? es una película muy potente que se torna asfixiante e incómoda gradualmente, como gradual es el desgaste físico y psicológico de sus personajes, unos pobres atormentados que se agarran a cualquier mínima posibilidad de desahogo de su situación, aunque sea a un alto precio. Y Pollack escarba las debilidades de sus personajes hasta dejarlos exhaustos, como tras esa angustiosa carrera por parejas con la joven embarazada a punto de desfallecer ante un público morboso que aplaude despreocupado la jugada. Y todo rodado con gran pericia técnica. El maratón, que parecía un concurso inocente, se vuelve un espectáculo cruel e interesado, la vida misma en tiempos de crisis. Una película gloriosamente deprimente y pesimista. Tremenda. 

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RESEÑA DANIEL: Son humanos. Son perdedores. Seres desilusionados que buscan de una u otra forma obtener una oportunidad más en la vida. Pollack dirige una de las películas más austeras, impresionantes y sumamente electrizantes que se han rodado en torno a la miseria humana, el desaforado morbo y el patetismo. No salimos de la sala, mientras varias parejas, en plena Gran Depresión, se sumergen a una maratón de baile para un jugoso premio de 1500 duros. Cada uno muestra las cenizas de lo que fueron, lo que queda es lacónico; inician este reto álgido dominados por la desesperación, entre escuetos pensamientos, degradados a ser la carne fácil de muchos otros que se ríen, mofan y hacen escarnio de aquellas víctimas hundidas por el sueño americano. Un film cuyo pozo es tan profundo del que se ramifican innumerables lecturas, que incluso en nuestra sociedad actual se siente tan potente. Una crítica latente, feroz, satírica y finalmente crudísima al sistema que hoy gobierna muchas sociedades. Pollack consigue hacer que el espectador salga exhausto y reflexionando sobre lo mostrado. Su realismo hiela la piel, una especie de radiografía, beneficiado además por impresionantes interpretaciones y un montaje que brilla con lucidez. Un film duro, dinámico, pero que necesita mirarse con detenimiento para aprovechar su desgarrado mensaje y contundente análisis. 

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RESEÑA MAYRA: Danzad, danzad malditos es el retrato de una sociedad desesperada y desesperanzada de la Norteamérica sumergida en la Gran Depresión. Esta es una película con una trama que puede parecer sencilla, pero en realidad es de contenido tan profundo como desolador e interesante. Gran parte del film transcurre en un salón de baile donde concurrirán un gran grupo de personas con una sola cosa en común, la miseria económica que se acarreaba en ese entonces, y el objetivo de ganar dicho concurso de baile para poder mejorar sus vidas. En ese ambiente tenso y desolador los personajes se irán dando a conocer hasta hacernos partícipes de sus realidades. Danzad, danzad malditos es el triste retrato de un espectáculo a costa de la miseria y el sufrimiento de unos tantos, mientras el morboso público aplaude y disfruta del ‘show’. Un drama con interpretaciones destacables, entretenido, intenso, pesimista y con un final apabullante. Reconozco que el visionado de esta cinta superó con creces mis expectativas, que la verdad eran muy pocas.

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VALORACIÓN DE LA CRÍTICA

Adaptación de una sombría novela de Horace McCoy, ambientada en uno de los maratones de baile que se organizaban en los Estados Unidos en la época de la Depresión. Constituye una visión acerada y lúcida de esta etapa histórica. Pollack consiguió un film tan convincente como duro, aunque en los momentos de cargar las tintas ponga al descubierto el artificio de su juego. Ello no invalida la probidad de sus resultados. Fotogramas, Redacción

Estridente, obvia y con un microcosmos tan malvado como pretencioso. Time Out, Redacción

Es deprimente como una visita al infierno, no apetece verla muchas veces... pero hay que visionarla. Importantísimo film sobre la Historia de América, sin un gramo de glamour. Inolvidable. Austin Kennedy, Film Geek Central

NOTA DE LA CRÍTICA

Filmaffinity: 7'3 / IMDB: 7'9 / Sensacine: 7'8 / Rottentomatoes: 8'65
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VALORACIÓN DEL JURADO FESTIVAL

El jurado del CSF ha decidido promover el film a  
12 PREMIOS DEL FESTIVAL:

Mejor película
Mejor director: SYDNEY POLLACK
Mejor actriz protagonista: JANE FONDA
Mejor actor secundario: GIG YOUNG
Mejor actriz secundaria: SUSANNAH YORK
Mejor reparto
Mejor banda sonora original: JOHNNY GREEN y ALBERT WOODBURY
Mejor banda sonora adaptada
Mejor guión adaptado: JAMES POE y ROBERT E. THOMPSON
Mejor montaje: FREDRIC  STEINKAMP
Mejor diseño de producción: HARRY HORNER y FRANK R. McKELVY
Mejor canción: Easy Come, Easy Go

NOTA DEL JURADO

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