domingo, 14 de agosto de 2011

Una película fallida: Crítica de ALL GOOD THINGS

Andrew Jarecki dirigió uno de los documentales norteamericanos más impactantes de la década. En ese Capturing the Friedmans, el director desmontaba el ideal de familia norteamericana sacando a la luz los secretos más oscuros de un respetado cabeza de familia y su educadísimo hijo mayor. All Good Things, primer paso de Jarecki en la ficción (aunque no del todo: vuelve a inspirarse en un caso real), conserva parte de ese interés por los traumas infantiles, por el polvo que se esconde bajo la alfombra que decora salones aparentemente relucientes. Por desgracia Jarecki, que ha tardado siete años para armar su segundo largometraje, parece seguir dominando mejor los materiales de archivos que los entresijos de una buena ficción. Capturing the Friedmans era un excelente drama y un thriller de gran perversidad; All Good Things, que tiene todos los ingredientes para ser un thriller de nivel, en cuya historia late un drama muy cinematográfico (un hombre atormentado que a los siete años vio cómo su madre se suicidaba), sorprende naufragando en un estrepitoso mar de dudas. La película empieza bien, desarrolla bien su idea inicial, los personajes resultan atractivos y en seguida se intuyen los ingredientes de una buena sesión de intriga. Pero esas 'cosas buenas' terminan, y la trama acaba tomando la opción más grotesca, el giro de guión más insatisfactorio. Al pobre Ryan Gosling le toca estar durante media película con un peinado horrible que en ningún caso confiere miedo o misterio a su personaje. Frank Langella suma otro papel de hombre mayor de expresión severa y lacónica, muy en la línea de su otro thriller fallido: The Box. Poco se puede rascar de una historia que se enreda y enfada consigo misma hasta mutar en algo extraño, sin demasiado sentido, con atractivo cero. Da pena porque Jarecki, como Richard Kelly, es un director con talento. Afortunadamente Kirsten Dunst tendrá su Melancholia para purgar pecados, y Ryan Gosling no necesitará esta película para ser uno de los artistas del momentos (Drive, The Ides of March y Crazy, Stupid, Love están a la vuelta de la esquina, sin contar la todavía pendiente de estreno Blue Valentine). Den por seguro que nunca se estrenará entre nosotros: su camino será del anonimato a las sobremesas de Antena 3. A veces en esto del cine, sin uno saber muy bien por qué, aun teniendo una buena historia y buenos actores entre manos, las cosas salen mal: All Good Things es un ejemplo. La auténtica perversión es el título: ¡menuda ironía!


Nota: 5

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3 comentarios:

Emilio M. Luna dijo...

De hecho, tras Capturing the Friedmans se esperaba mucho de Jarecki. All Good Things que estaba posicionada cómo título para la temporada de premios de repente tuvo diversos cambios de fecha y el mismo estudio la dejó a un lado.

Raro que llegue a España, una película que es decente si más.

Un abrazo Xavi.

Mario Salazar dijo...

Coincido en lo que escribes, la película parece aspirar a más pero termina cayendo en mucho aspectos ridículos, no me he podido quitar esa sensación, es definitivamente un filme fallido, la historia real tiene potencial pero se maneja terriblemente en pantalla, lo extraño es que posee a dos actores interesantes como Dunst y Gosling, pero hasta los más talentosos tienen sus días oscuros. Un abrazo.

Mario.

Unknown dijo...

film fallido? de que diablos estan hablando? el que hizo esta critica no tiene ni nocion de lo que es UNA BUENA PELICULA y habla por hablar. Esta pelicula es una de las mejores que vi en mi vida