La vida en pareja
TODO ES MENTIRA, de Álvaro Fernández Armero (España, 1994)
¿De qué va?: Pablo es un veinteañero bueno que cree que en el amor solo tienen éxito los macarras. Lucía se ha acostado con muchos hombres pero ha tenido pocas relaciones serias. Ambos empiezan una relación llena de momentos felices y constantes peleas. Lucía trabaja como traductora de italiano, mientras que Pablo no tiene una dedicación fija. Unos altibajos en los que tendrán mucha importancia los amigos de Pablo, un grupo de urbanitas alternativos con gustos más que particulares.
Palmarés: Dos nominaciones a los premios Goya 1994: mejor actor revelación (Malla) y mejor dirección novel (Fernández Armero). Premio a la mejor actriz para Penélope Cruz en el Festival de cine de comedia de Peñíscola. Nominación al Fotogramas de Plata a la mejor actriz del año 1994 para Penélope Cruz, conjuntamente por su trabajo en Alegre ma non troppo y Todo es mentira.
El dato: El film tuvo un notable éxito: se mantuvo seis semanas en el ranking de las 10 películas más vistas y recaudó alrededor de 150 millones de pesetas, la misma cifra que figura en su presupuesto oficial. Coque Malla, tras la fiebre de los 80, afrontó su primer papel en el cine dejando de lado su carrera como cantante de Los Ronaldos: la música del film corrió a su cargo, y aunque posteriormente intervino en otros films, se ha dedicado por entero a su faceta musical. Otro ejemplo de actriz-cantante es Christina Rosenvinge: tras Todo es mentira, intervino como actriz y compuso el hilo musical de La pistola de mi hermano, ópera prima de Ray Loriga, que por aquél entonces era la pareja sentimental de Rosenvinge. El director Fernando Colomo interviene como actor en Todo es mentira, un trabajo que repitió en todas las películas de su amigo Manuel Gómez Pereira hasta Cosas que hacen que la vida valga la pena, destacando el taquillazo de 1997 El amor perjudica seriamente la salud, también junto a Penélope Cruz.
Reseña: Según el director Álvaro Fernández Armero, Todo es mentira es una película autobiográfica que bebe de su experiencia en el Madrid de principios de los noventa. El objetivo era contar la falsedad que rodeaba a la mal llamada 'Generación X', la que media entre la locura de la Movida y la promoción del 'botellón' o del 'ninismo'. Y aunque Todo es mentira, sobre el papel, pudiese ser una descripción de los nuevos jóvenes urbanitas (a ojos del 2013 son, efectivamente, unos chavales 'de otra época'), en realidad lo que ofrece Fernández Armero es un drama romántico en clave juvenil que busca un equilibrio, no siempre conseguido, entre la típica comedia norteamericana y la conocida 'comedia madrileña' que en esa primera mitad de los 90 seguían ofreciendo Colomo, Pereira y otros. A esos antecedentes Armero le quita las risas y añade un guion con buenas frases, unos actores solventes y un espíritu aventurero, consciente de contar una historia de juventud desde una mirada igual de joven. Joven, que no inmadura. Con todo, Todo es mentira está tan alejada del cine y del público del siglo XXI que difícilmente puede interesar más allá de la anécdota, o sea, de ver los comienzos de Malla, Rosenvinge y de una despampanante Penélope Cruz (seguramente la escena del baile flamenco en el bar fue la clave para que interpretase años después La niña de tus ojos). Una película con buenas intenciones, que inspira buen rollo, que tiene personajes agradables y que cuenta los problemas de la vida en pareja con más cariño que espíritu crítico: solo apta para los más ingenuos.
Para arqueólogos de la comedia madrileña.
Lo mejor: Una Cruz que ya apuntaba muy alto desde sus inicios.
Lo peor: Cierto decaimiento del ritmo en el segundo tramo de metraje.
No hay comentarios:
Publicar un comentario