CORTOMETRAJE | DÍA Y NOCHE (DAY & NIGHT), de Teddy Newton

DÍA Y NOCHE (DAY & NIGHT), de Teddy Newton

EE. UU., 2010. Animación, 6 min. ¿De qué va?: La noche y el día se encuentran por primera vez. Esta es la historia de sus diferencias y su reconciliación.


CRÍTICA XAVIER: Antes de Del revés (Inside Out), la factoría Pixar ya hacía gala de un cine más austero y conceptual en Día y noche (Day & Night), una pequeña y simpática pieza que, como las mejores obras mudas, hace sonreír y enternece a la audiencia. El día y la noche, representados en dos seres juguetones, se encuentran, se pelean y finalmente asumen sus diferencias coincidiendo con el momento en el que el cambio de luz produce la esperada alternancia de personalidades. La relación de los estados de ánimo de sus protagonistas con escenas matutinas o nocturnas, así como la progresión narrativa de la historia (sencilla, directa, sin adornos, de lenguaje y mensaje universal), elevan la anécdota a la categoría de joya. Pixar, en las distancias cortas, gana enteros, y esta es una de sus mejores composiciones. ★★★½

CRÍTICA RONNIE: Ciertamente Día y noche no está al nivel de los mejores cortometrajes que ha realizado Pixar, pero eso no le resta entretenimiento puro. El concepto de enfrentar el día con la noche es una metáfora a la clásica rivalidad entre el bien y el mal, la luz y la oscuridad. Aunque en el corto esa metáfora trasciende y elabora un mensaje de unión y de atrevimiento, que podría resumirse en lo siguiente: no le temas a lo desconocido. ★★★½

CRÍTICA KOSTI: El arte de lo visual y el poder de la imaginación se unen para mostrarnos una obra de contrastes donde las diferencias unen. Con tan solo dos personajes y un único escenario, el corto de Pixar nos traslada a un mundo de imaginación lleno de color. Día y noche se encuentran, se analizan y se percatan de sus apreciables diferencias. Pero esas diferencias sólo son momentáneas. Pronto descubren que lo único que les separa es un punto de vista diferente, pero el escenario y su contenido sigue siendo el mismo. A través de sus imágenes, Día y noche trasmite la importancia de la tolerancia y la amistad, convirtiendo las diferencias en simples circunstancias anecdóticas. Nunca eso de que los opuestos se atraen ganó tanto sentido.  ★★★½

CRÍTICA ALBERTO: Atender a ciertas cotas en el mundo de la animación no se antoja una epopeya demasiado complicada, ya que verbalizando ciertas formas y figuras se puede desarrollar el adjetivo de lo bonito. No obstante, a las posibilidades expresivas de este juego cabe pedirle mucho más y explotar definiciones complejas e interesantes. Este cortometraje de Pixar es de lo mejor que esta industria ha formulado en mucho tiempo, ya que su capacidad estilística al servicio de un mensaje tan latente, capaz de ser trasladado a tantos ámbitos de nuestra vida, le otorga ese escalón superior por encima de otras muestras que quedándose en lo edulcorado se despojan de su posible madurez expresiva. Desde su comienzo, tanto en las formas como en la conjunción de sus contenidos, esta interesante historia ondea con atino sobre las sendas de la expresión más artística y la definición conceptual que muchas veces requiere la mejor animación para alcanzar un mayor poso en los mensajes que transmite. ★★★★

CRÍTICA ISIDRO: Para mí existen cinco pilares fundamentales en la cinematografía mundial: Kubrick, Tarantino, los Coen, Hertzfeldt y Pixar. Y en formato corto la compañía del flexo me parece igual de intachable: tras hacerme reír a carcajada limpia con Pajaritos o Presto, y llorar a lágrima viva con Parcialmente nublado, Pixar estrenó junto a la película de mi vida un alarde de conjunción de técnicas tradicional y de vanguardia, un slapstick ingenioso, colorista y dinámico en el que la Noche y el Día se enfrentan al más puro estilo buddy movie, con todo su buen rollo y moraleja maja. Una auténtica chulada. ★★★★

NOTA MEDIA DEL JURADO: ★★★½

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