Siempre es un placer contar con una película de Clint Eastwood en la cartelera. Gran Torino, construida a modo de autohomenaje, referencia al mito de tipo duro e icono americano que siempre ha representado Eastwood, ya escondía en sus entrañas un western crepuscular que sabía a despedida. Pero ese no será el broche de oro de la carrera de Eastwood. De momento estrena Más allá de la vida, en la que el tema de la muerte vuelve con más fuerza, de forma más evidente y también más rocambolesca, menos sutil. Es una novedad que el director aposte por una estructura de historias cruzadas, pero afortunadamente el guión de Peter Morgan está en manos de un profesional, un realizador experto, un contador de historias que sabe cómo emocionarnos, cómo capturar el plano perfecto y cómo explotar lo mejor de sus actores. Se nota que detrás de Más allá de la vida está la cabeza pensante de Eastwood, que lleva toda historia, por imposible que parezca, se incluya en el género que se incluya, a su terreno: el melodrama tierno y espectacular. Eastwood triunfa en todas sus vertientes: coreografiando escenas de suma complejidad (el momento del tsunami), construyendo diálogos intensísimos (la confesión de Matt Damon a Bryce Dallas Howard en la cocina) y jugando a mover las piezas del guión (el reencuentro en la feria del libro londinense). Aunque no crea en el más allá que propone la película, sí confío en Eastwood. Y me dejo llevar por su arte, incluso le perdono esa clausura tan almibarada. No es comparable a Mystic River, Million Dollar Baby o El intercambio (las tres, obras maestras), pero tiene la garra del buen cine. Más allá de la vida acaba siendo una cinta muy digna, lo más místico de Eastwood. La taquilla ha vuelto a responder, el público sale del cine bastante reconfortado y la crítica ha sabido valorarla en su justa medida. Me pregunto si habrá vida más allá de Eastwood, el rey Midas que convierte en oro todo lo que toca. Sin ser genial, Más allá de la vida es la historia de un realizador consciente de su mortalidad como persona y cineasta. Habrá que ir a la sala, celebrando que seguimos contando con los nuevos proyectos de un maestro. Un motivo más para aceptar Más allá de su vida con todas sus flaquezas.
Nota: 7
Precisamente vengo llegando del cine de ver Hereafter (3 personas en sala, incluyéndome, decepcionante). Y verdaderamente me ha gustado, claro que no llega al nivel de las tres que mencionas, pero ¡fuck! es Eastwood y me ha hecho llorar prácticamente. hehehe.
ResponderEliminarLo siento, yo si soy demasiado dado a las manipulaciones.
Saludos!
No habia oido hablar muy bien de ella y me extrañaba un montón llevando la firma de Clint Eastwood, pero me has animado a verla. Espero que no me decepcione.
ResponderEliminarMe ha gustado pero no la tengo como mis favoritas de Eastwood. Había pensado que iba a tratar más de el más allá pero me sorprendió gratamente al ver que trataba de la vida de aquellas personas que sufren, que están tristes.
ResponderEliminarMe pareció espectacular la escena inicial del tsunami!
Saludos!
Genial comentario: "Fuck, es Eastwood!" A mi me gustó mucho la peli, sí es un melodrama pero ahi se nota la diferencia cuando un buen director maneja la historia, de manera sobria sin aspavientos.
ResponderEliminarNada que ver con Iñárritu y sus historias cruzadas y gente que ve a los muertos...
Buf, compa Xavier, no paro de acumular referencias contradictorias, y la cuestión es que aún no he visto la peli. A mí ya me decepcionó un poco la anterior de Clint, Invictus, pero siempre partiendo de la base de que, incluso cuando "flojea", el cine de Eastwood sigue siendo interesante. Y llegar al nivel de esos grandiosos títulos que señalas es muy, muy complicado.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y seguimos trasteando.