jueves, 7 de mayo de 2020

CRÍTICA | ARLINGTON ROAD. TEMERÁS A TU VECINO, de Mark Pellington



Paranoia terrorista (antes del 11-S)
ARLINGTON ROAD. TEMERÁS A TU VECINO
3 nominaciones a los Saturn Awards: película, guion y actriz secundaria
EE. UU., 1999. Dirección: Mark Pellington Guión: Ehren Kruger Música: Angelo Badalamenti Fotografía: Bobby Bukowski Reparto: Jeff Bridges, Tim Robbins, Joan Cusack, Hope Davis, Robert Gossett, Spencer Treat Clark, Mason Gamble, Stanley Anderson Género: Thriller Tráiler: Link Fecha de estreno en España: 14/05/1999
¿De qué va?: Michael, un profesor que acaba de enviudar, socorre a un chico con la mano quemada. El niño es el hijo de los Lang, la familia que acaba de instalarse al lado de su casa. El hijo de Michael hace migas con el chaval, y Michael empieza a frecuentar la casa de sus vecinos. Todo cambia cuando el hombre cree que los Lang esconden algún secreto.




Antes de que los Estados Unidos entendieran que, en materia de terrorismo, la amenaza principal era "exterior", el cine norteamericano nos regaló un ramillete considerable de títulos protagonizados por héroes que salvaban el mundo a base de gadgets y músculos. Ese periodo, delimitado grosso modo entre La jungla de cristal (1988) y El pacificador (1997), estaba marcado por los fantasmas de la Guerra Fría, así como por unas constantes efectistas que convertían dichos blockbusters en productos de consumo masivo, con un discurso intrascendente o, cuanto menos, ingenuo. Arlington Road forma parte de esa constante, si bien se distancia de sus compañeras de género y generación al interesarse por la paranoia "interna" de un ciudadano estadounidense. El héroe, en otras palabras, queda sustituido por el antihéroe.


El protagonista de la mejor cinta de Mark Pellington es un profesor de Historia, para más inri esposo de una agente del FBI fallecida durante una redada. Como viudo, también en calidad de conocedor de la cronología de su país, el personaje tiene acceso a un mundo de claroscuros que termina por destruir su estabilidad. El mérito de la película, más allá de ser un involuntario puente entre el thriller noventero, carente de dialéctica política, y la ficción posterior, instaurada en el dolor/terror masivo, reside en su capacidad para aunar distintos referentes. Efectivamente, el policía que daba vida Bruce Willis y el coronel que interpretaba George Clooney en las dos películas citadas sobrevuela como contexto inevitable. La memoria también remite a historias de desasosiego casero al estilo La mano que mece la cuna o De repente, un extraño. Incluso, y lo que sigue no es nada exagerado, al cine de Pollack, Polanski y Hitchcock. Hasta sus títulos de crédito de reminiscencias seriéfilas, la música de Angelo Badalamenti y el magnífico trabajo de Tim Robbins, un villano a la altura del de El cabo del miedo, aportan a un conjunto que, por momentos, parece instaurado en el ensimismamiento de su década.



En resumen, Arlington Road, injustamente menostenida en el momento de su estreno, sobrevive como un retrato inexacto pero lúcido sobre esa "paranoia terrorista" que estallaría, delante y detrás de los focos, el 11 de septiembre de 2001. Ahora resultaría difícil creer que el enemigo pueda ser nuestro vecino (¿logrará eso la psicosis del coronavirus?), pero de ese planteamiento naif queda toda su carga metafórica. También, y aunque nos pese, resulta difícil encontrar en la actualidad una película con tanto sentido del ritmo, iniciada con un macguffin televisivo y clausurada con un final que, a pesar de su aparatosidad, cierra con coherencia todas sus fugas. Sin llegar al nivel de El silencio de los corderos o Seven, obras cuyo foco de maldad obedece a principios más mesiánicos que sociopolíticos, Arlington Road merece figurar en la lista de los mejores thrillers de los 90.


Para espectadores que añoran un buen largo de intriga.
Lo mejor: Consigue construir una historia recia a pesar de sus giros de trama.
Lo peor: Algunas vueltas de tuerca innecesarias en su segundo tramo.


Descubre todos los estrenos de 1999 en 
EL PODCAST DE C&R: Especial CINE DEL 1999
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario