Hielo, sangre y crucifijos
SAKNAD (MISSING)
Suecia, 2017. 1 temporada de 4 episodios. Emitida por C More. Género: Thriller, drama Duración: 44 min. por episodio Tráiler: Link Dirección: Colin Nutley Reparto: Helena Bergström, Johan H:son Kjellgren, Mattias Nordkvist, Anna Bjelkerud, Johan Widerberg, Molly Nutley, Julia Dufvenius, Samuel Fröler, Saga Samuelsson, Fredrik Meyer, Vanna Rosenberg, Sharon Dyall, Carina M. Johansson, Gustav Levin, Tova Magnusson, Philip Martin, Eliot Waldfogel, Madeleine Barwén Trollvik, Ralph Carlsson, August Fröler, Denize Karabuda, Maja Rung, Caroline Söderström, Johan Berg
Colin Nutley, director británico de 75 años que ha desarrollado casi toda su trayectoria en Suecia, ha sorprendido a todos con Saknad, una miniserie de cuatro episodios que supone su regreso a la pequeña pantalla tras casi tres décadas de su último proyecto televisivo. Como gran parte de su filmografía, el título está protagonizado por su esposa, Helena Bergström, y su hija, Molly Nutley, aunque en este caso transforma su particular tragicomedia blanca (explotada en películas como House of Angels y Bajo el sol) en un thriller que sigue los códigos de la intriga nórdica, un subgénero casi inexistente cuando Nutley, en el cenit de su carrera, sorprendió a todos con películas que causaron un gran impacto en la sociedad sueca, además de contar con un notable recorrido en festivales, ternas de premios y carteleras de medio mundo.
Tal y como sucedía en Jordskott y El puente, Saknad está protagonizada por un personaje femenino que se ve obligado a investigar la desaparición de una joven en extrañas circunstancias. La agente de policía, Maja Silver, huyó tiempo atrás de ese lugar, por lo que su trabajo se convertirá en una excusa para exorcitar fantasmas personales. El fanatismo religioso, el funcionamiento de determinadas sectas y el ambiente opresor que se respira en algunas zonas rurales conforma las directrices de una historia que, a todos los niveles, no se desmarca ni un ápice de todos sus antecedentes. Suecia, de nuevo, demuestra por la vía del noir que su pátina de país bienestante no es más que una fachada de hielo. Con una diferencia: en esta ocasión, la narración se acerca más al de un telefilm largo (180 minutos de metraje) y dirige un veterano totalmente ajeno a la serialidad de los estrenos más recientes.
Esta cronología dista de ser casual porque, por desgracia, en cada fotograma de Saknad se intuye a un cineasta que quiere acometer una historia que, en cuanto a estilo y generación, no le es propia, ni tan siquiera familiar. Los cuatro episodios de la serie apelan a las truculencias propias de la literatura y las películas que nos han llegado de Escandinavia en los últimos años, pero Nutley no consigue dotar al conjunto de la intensidad suficiente como para que el espectador reste pegado a la pantalla descifrando las pesquisas del caso. Tampoco ayuda la parca descripción de personajes, con pasados que nunca se llegan a concretar, vínculos difusos y caracterizaciones que, por banales, terminan resultando meros subterfugios para avanzar la trama sin demasiadas sutilezas (basta un par de ejemplos: nunca llegamos a saber qué pasó entre Maja y su jefa ni quién filtraba datos de la investigación, a la vez que la faceta travestí del personaje de Samuel Fröler ni tan siquiera sirve para poner de manifiesto la hipocresía del entorno, tanto de la población como del núcleo familiar, de la joven desaparecida).
En resumen, Saknad es una versión deslucida de la moda criminal escandinava, por mucho que todos sus capítulos puedan verse sin dificultad (también, sin entusiasmos). Ello no nos sirve para vaticinar el final de los dramas televisivos del norte de Europa, pero sí pone de manifiesto la proliferación incontrolada de series que nacen a la sombra de otras más populares, casi siempre todas mejores. Una tendencia que sucede en todos los rincones del planeta seriéfilo, no sólo en Suecia. Esperemos que Colin Nutley haya tomado cartas en el asunto y vuelva, si los achaques de la edad se lo permiten, a los paisajes más cálidos y a las tramas de corte amable que tanto domina.
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