CRÍTICA | PERFECT BLUE, de Satoshi Kon

PERFECT BLUE

Festival de Sitges: Mejor película de animación

Japón, 1997. Dirección: Satoshi Kon Guión: Sadayuki Murai, a partir de la novela de Yoshikazu Takeuchi Fecha de estreno en España: 30/10/1998 Tráiler: Link

Crítica José: Cinta animada que nos traslada a Japón, en un concierto en donde se presenta un grupo llamado “Cham”, de donde Mimarín ha presentado su último concierto con el grupo. Y ahora ha decidido dejar a un lado la fama, pero al parecer alguien conoce algo sobre ella, al recibir un mensaje por fax donde dice “Traidora”. Ahora que ha dejado a un lado su grupo de música, ella decide emprender en la actuación, pero ahí tampoco marcha también su vida, teniendo detrás de ella alguien que la está atacando con mensajes que puedan afectar su bienestar. El manejo de suspenso que se genera es acertado, creando en el espectador una sensación de intriga. La idea que se plantea de adentrarnos a la vida de Mimarín, es interesante en como el director hace cada detalle, y de llevarlo a animación se llega a acomplejar un poco. Un thriller psicológico animado eficaz, que por momentos juega con la mente del espectador, al crear imágenes tan extrañas e inimaginables. Claro sabemos, que los japoneses tienden a tener ideas locas y en Perfect Blue, vemos una de ellas. Un tema importante que posiblemente no sea muy ideal a trabajar es el “síndrome de personalidad múltiple”, el cual es poseído por Mimarín, al momento no sabes que sucede en realidad en la película, por momentos tu cabeza está tranquila, pero por otros momentos tu cabeza está al borde de explotar de no saber qué ha sucedido durante cierto tiempo de la cinta. Un guión que brota de una genialidad, que por momentos te llegas a sentir cansado de percibirlo, pero vale la pena ver la cinta, si es la intriga lo tuyo. Nota: 8 / 10

Crítica Mayra: Perfect Blue es un film de animación que narra la curiosa historia de una adolescente quien decide abandonar el grupo musical que le ha concedido una moderada fama, para así seguir su propio camino e intentar convertirse en actriz. La cinta es un surrealista y onírico viaje por la vida de esta popular joven que no tendrá fácil alejarse de su imagen de idol. Perfect Blue es un  thriller psicológico muy interesante e intenso el cual nos muestra el lado menos amable de la popularidad y de manera interesante sitúa el internet como un protagonista más de la trama; en una época en la que su auge, importancia y peligros apenas iniciaban. Sin duda estamos ante un guión muy bien entramado que logra captar la atención y sumergir al espectador en la intriga a lo largo de sus ochenta minutos de metraje,  tiempo en el que su oscuro relato de mentes retorcidas no da tregua en ningún momento, consiguiendo plasmar en fotogramas a través de un correcto montaje el terror interno del personaje protagonista. Perfect Blue es una obra que incluso ahora, dos décadas después, resulta curiosa, compleja y muy entretenida. Destacable y recomendable. Nota: 7 / 10

Crítica Ronnie: Perfect Blue es una de las cintas de animación más fascinantes de la década de los noventa. Un juego de realidades que nos sumerge en la mente de Mima Kirigoe, una cantante de j-pop con moderado éxito que, junto a otras dos chicas, forma el grupo vocal Cham. Mima, con expectativas de nuevas experiencias, deja la música para desarrollar su carrera como actriz de televisión, ante el asombro de sus fans. Poco a poco ella se va desprendiendo de esa imagen de estrella pop generada por sus intervenciones musicales y comienza a ser acosada y amenazada por un antiguo fan que no le perdona la “traición”. Debido a esto, Mima desarrolla un profundo sentimiento de culpa y, cuando empieza a confundir la realidad con sus recuerdos, sufre lapsos temporales que la llevan a cuestionarse su propia identidad. Lo fascinante de esta cinta es la forma en la que está contada al detalle, cómo Satoshi Kon logra que, junto a su personaje principal, los espectadores nos perdamos en esos lapsos que tiene Mina, conozcamos los cabos que quedan sueltos y los juntemos para entender lo que ella entiende. Una guión agobiante que te atrapa en su inmensidad y hace que hagas propios los miedos y obsesiones de Mina, con intensidad y crudeza. Perfect Blue es un viaje intimista, una figura con la que se crea un vínculo emocional propio. Nota: 10 / 10

Crítica Xavier: La trayectoria de Satoshi Kon dista de ser habitual. Quien escribe cree que los largometrajes de Kon fueron únicamente un preludio de su obra maestra: la serie Paranoia Agent. Perfect Blue, el título que puso al japonés en el mapa internacional, concentra todos los temas capitales de su artífice. Listamos algunos: la incapacidad por discernir la realidad de la ficción, las consecuencias de la popularidad, la influencia del audiovisual entre los adolescentes y los peligros de las nuevas tecnologías. Y de todo ese acervo, destaca la habilidad narrativa de Kon a la hora de desplegar una trama que, intuyéndose ordenada, va sumiendo al espectador en un lento y eficaz estado de confusión. Perfect Blue, como resultado, es un portentoso ejercicio noir, avanzado a su tiempo, adulto a pesar de sus formas, desafiante incluso cuando se comporta como un capricho aniñado. Retorcido, como cualquier anime que se precie. Lúcido y tarado, en consonancia con la personalidad de Kon. Un ejercicio cinematográfico que vio la luz en los 90, pero que se entiende y se disfruta en mayor medida con ojos de 2017. Lástima que Kon, fallecido de forma prematura, no esté presente para ver el éxito de sus criaturas y, sobre todo, para parir obras tan imponentes como esta Perfect Blue. Nota: 7 / 10

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