miércoles, 28 de septiembre de 2011

¡MUCHAS FELICIDADES, PA NEGRE!

Con Pa Negre ha sucedido uno de esos milagros cinematográficos que sólo se producen una vez cada mucho tiempo. Hace más de un año que se habla de ella, y sigue allí, llenando portadas, siendo noticia por un motivo u otro. Primero, su paso triunfal por el Festival de San Sebastián, la Concha de Plata a Nora Navas y las excelentes reseñas de medios tanto nacionales como internacionales. Su estreno el 15 de octubre no fue ni masivo ni mayoritario, pero logró aguantar meses y meses en cartel. Sus nominaciones al Goya no dejaron de ser una sorpresa, y a partir de ahí vino el Forqué para Navas, los 9 Goyas, su notable recibimiento tras su segunda vida comercial gracias a la gala del cine español, el considerable número de dvds vendidos, el Premio de la Cinematografía para Villaronga, su estreno en Francia y ahora la representación española al Oscar. La última ganadora del Goya que se vió en Hollywood fue Volver, con la particularidad que Pa Negre ha sido elegida un año después de su estreno (algo que la emparenta con la Belle Epoque de 1992, Oscar a la mejor película de habla no inglesa en el 1993). Y el hito más evidente: es la primera cinta catalana y en catalán que representa a España, algo que no pensaba ver en toda mi vida y que como catalán y español celebro. Pa Negre está donde le pertoca porque es una película genial: no han influido ni nacionalismos baratos, ni excusas políticas, ni manipulaciones ni tongos. Pa Negre es una obra maestra de nuestro cine, y los académicos españoles han sabido entender las peculiaridades, no solo lingüísticas, de la historia. El mensaje es claro: no importa la lengua, sino la calidad del material con el que se trabaja. Para la cinefilia su elección deja cierta incertidumbre: aunque pueda existir la sensación de que ninguna película española más actual ha merecido, según el criterio de la Academia, estar en los Oscar, la verdad es que la producción local del 2011 está siendo y acabará siendo muy buena, contando las finalistas La piel que habito y La voz dormida, algo que seguro se verá reflejado en la selección del año que viene. De momento, dos apuntes. El primero: Pa Negre tiene posibilidades. Es un western, un drama descarnado, un genial ejercicio de historiografía con una excelente dirección de actores, con un ambiente cercano a El laberinto del fauno que gusta a los viejos hollywoodianos. El segundo: todos los países están arriesgando mucho en sus selecciones. Terraferma por Italia, Pina por Alemania y La guerrè est declaré por Francia, países siempre favoritos, no están entre los mejor posicionados; Portugal y su José y Pilar es demasiado extravagante, en Hollywood no triunfa el cine que representa Nader y Simin de Irán, Once upon a time de Turquía o Le Havre de Finlandia; y el resto de cintas hispanas, cada vez más presentes en la terna de nominados finales, no parecen que vayan a conseguir la nominación (La casa muda de Uruguay, Miss Bala de México, Violeta se fue a los cielos de Chile y El rumor de las piedras de Perú lo tendrán muy difícil, aunque la colombiana Los colores de la montaña podría ser la nueva La teta asustada). De momento, las bazas más potentes son la israelí Footnote y china The Flowers of War. Así que... ¿por qué no soñar con el Oscar? Pase lo que pase, vamos a Hollywood con el trabajo bien hecho y la cabeza bien alta. ¿Vendrán los EFA antes de los Oscar para completar la carambola? Nunca un trozo de pan negro había sabido tan bueno. Moltes felicitats a tot l'equip de la pel·lícula i moltíssima sort!



2 comentarios:

Jose Barriga dijo...

Realmente creo que tengo que volver a verla ya que no me intereso mucho la primera vez que la vi. Aun así mucha suerte a Pan Negro que ya suena como fuerte candidata en las diferentes webs norteamericanas.

Te invito a leer mis reseñas de DRIVE y LE GAMIN AU VELO. Un saludo Xavier.

Ismael Cruceta dijo...

Me gustó muchísimo. Esto fue lo que dije de ella en Cajón de historias:
Muy buena película, de las que dejan poso y te hacen pensar después de verla, pensar sobre lo que estaríamos dispuestos a hacer, quizá, por amor, quizá también, por dignidad, quizá por respeto hacia aquello en lo que creemos. Te hace pensar, asimismo, sobre las raíces, sobre lo que te une a tu sangre, lo que te aferra y te estrecha.

Pero, sinceramente, creo que deberíamos haber mandado a Hollywood La piel que habito, que es una película maravillosa tanto en el fondo como en la forma, y con miras internacionales, por Almodóvar y por Banderas. Yo creo que nos hemos confundido. Pero toda la suerte a Pa negre, ahora voy con ella a muerte.