lunes, 23 de marzo de 2009

SERIES 11: HOUSE



a Cristian

Aún recuerdo una clase de química en la que un compañero empezó a hablar lindeces de una serie bastante extraña. Ahora House es conocido en el mundo entero, líder de audiencia en España y el producto más importante de Cuatro, la serie que la cadena más repone y mima. En este viaje de lo desconocido al deja vu han transcurrido cinco temporadas, algunas risas y otros tantos bostezos. Bryan Singer dirigió el primer capítulo de la serie y apoyó la franquicia como productor, una pequeña vuelta de tuerca a las tramas hospitalarias que encandiló al director de X-Men. Hugh Laurie, actor inglés de carrera irregular y desconocida, encontraría en los guiones esquemáticos de la serie(pese a lo alambicado de su léxico) su particular gallina de los huevos de oro, el personaje icono que le haría coleccionar premios a cascoporro. House, más detective que médico, suponía el primer doctor malcarado, traumático, egoista, cínico y loquaz de la televisión norteamericana, todo un mérito teniendo en cuenta que Urgencias y Scrubs imposibilitaban una reinvención del género. La novedad, cien episodios después, se ha desvanecido y causa sopor, básicamente porque la estructura narrativa siempre es la misma y porque los chistes del médico ya no son lo que eran. Ahí están los veinticinco millones de telespectadores yankis (más tres millones y medio de españoles) para darme la contraria... Digan lo que digan, y aunque la serie y sus instigadores se miren el ombligo creyéndose el súmum de lo rompedor, creo que House funciona mejor cuando olvida el planing habitual e incluye elementos de carácter más personal (debería haber un equilibrio entre la frialdad de House y la ñoñería de Anatomía de Grey, un punto medio que nadie parece dispuesto a explorar). De aquí que defiende Tres historias (1x21) como el mejor capítulo de la serie, aplauda gran parte de la segunda temporada y me sienta atraído por el cambio de cásting de la cuarta remesa de episodios. Prefiero el efectismo barato (la muerte de la novia de Wilson, el entierro del padre de House, las peleas de House con un policía cojonero o su ex-mujer, etc.) que la trama médica que cambia cada cuarenta minutos. El barco oscila, pero no parece dispuesto a naufragar.

House nos devuelve una imagen irreal e idealizada de la sanidad, aquí en forma de hospital privado y privativo. Los casos médicos juegan con el factor rocambolesco, algo que encandila a una sociedad que no goza de una sanidad pública gratuita. House es el paradigma del buen médico, ese doctor que no existe y que de existir sería inalcanzable. De él nacen todas las tramas: Cuddy, Wilson y su equipo de ayudantes son los satélites del astro House, una estructura bastante cerrada que está condenada a repetirse. A riesgo de ser un aguafiestas, un servidor defiende la cancelación definitiva de la serie antes de que el castillo de naipes se desplome de mala manera. House es aún una serie digna, con sus momentos agridulces y sus chistes efectistas. Ahora sigo la serie gracias a (o por culpa de, nunca se sabe) otro compañero: él cree que la serie concluirá con el suicidio del protagonista, mientras que quien escribe defiende una relación amorosa entre House y Cuddy. Esperemos que el equipo de House también empiece a diseñar el principio del fin. Sea como sea, la serie ya ha pasado a la historia.

2 comentarios:

Jefe Dreyfus dijo...

estoy con usted, es una gran serie a la cual, o se le da un giro radical y empieza a tantear nuevos registros, o mejor que vayan pensando en cerrar porque se empieza a hacer un poco repetitiva.. aunque cada temporada nos sigue regalando uno o dos capítulos impresionantes.

Alec Roivas dijo...

House me parece una serie regular, excelente en algunos capitulos y tan solo aceptable en muchos otros.

Siempre he pensado que cuando de serie sobre hospitales se trata el premio se lo lleva Scrubs, a pesar de ser un poco bizarra y sumamente irreal.

Además siempre he pensado que el personaje de Gregory House toma demasiados elementos del Dr. Percy Cox quien aparece en Scrubs.

Sobre Grey's Anatomy tengo una opinión muy negativa pero me la reservo para cuando entreges tu revisión en Series 12.

Saludos.